Bien, empecemos por el principio...lo de las cuestas es un poco exagerado, tampoco es para tanto...mientras no te de el ataque de "turistitis" y te pegue la vená de ir a ver la Alhambra...ahí estas perdido.
Pero tranquilo...que te dan dos opciones a elegir, a saber:
Opción 1- Sube a pata y descubre por qué los cristianos tardaron tantos siglos en reconquistar Granada (no es que los moros la defendiesen muy bien, es que los puñeteros pusieron la Alhambra en lo alto de un cabezo y los cristianos a mitad de camino ya estaban que no podían con los cojones y terminaban volviendo sobre sus pasos...hasta que a la Isabelita la "católica" le dió el ataque de gorrinitis y dijo que no se lavaba hasta que no se reconquistase la puñetera ciudad y el pobre Fernando el "católico" tuvo que pagar horas extras a la peña porque no había un cristo que se acercase a menos de 200 metros de su señora esposa sin mascara antigas, y como aún no las habían inventado, pues...
Ventajas de éste método...terminas con unas piernas que ni el Indurain y si haces la visita en el mes de Junio, lo mismo te da tiempo a apuntarte al Tour de Francia, que con las patorras que se te van a poner, las etapas de montaña te las meriendas...
Opción 2- Te pillas uno de los diversos microbuses que hacen la ruta de la Alhambra y el Albaicín (esta es la modalidad perra aunque no por ella exenta de riesgo).
Para empezar, estos microbuses tienen su propia leyenda, los llaman "el bus de los novios mellaos" y no es para menos...poneos en situación...subes, te sacas el billete con un conductor que parece Murdock el del Equipo A, con guantes de piloto de carreras y Casco (mala espina da esto, ¿no?), te sientas (si tienes suerte)(cosa harto dificil en estos bichos) y te pones a rezar lo que sepas o bien, te quedas de pie (si no hay sitio pa sentarse)(lo más normal del mundo)y te agarras como una lapa a lo primero que pilles mientras rezas lo que sepas porque en el momento que el tio arranca...pone aquella tartana a 200 por hora cuesta arriba (¿cómo lo hace? ni puta idea...algunos afirman que los microbuses esos tienen un sistema de propulsión alienígena sacado de una nave que se estrelló en la Alhambra, los marcianitos bajaron en busca de repuestos...pero no tuvieron narices de volver a subir las cuestas y la dejaron abandonada)...
Bueno, a lo que iba...que el loco al volante pone aquello a dos ruedas en las curvas, lo cual tiene bastante mérito si tenemos en cuenta que el "micro" suele estar lleno de gente, que las calles son de empedrado del shungo, estrechas como mi "ex" y, como ya dije antes, cuesta arriba...
Pues eso...que vosotros mismos...elegid lo que prefirais...morir por agotamiento y entre grandes dolores por las agujetas o dejaros los piños en los cristales del microbus si no os agarrais bien...
PD- Lo olvidaba...la leyenda de los novios mellaos cuenta que el dia del estreno de esa línea de microbuses, una pareja subió a la Alhambra y una de las veces que iban a darse un inocente "pico", el malvado conductor dió un brusco volantazo y la parejita se dió de piños la una con el otro...XD
Ta la próxima...
3 comentarios:
veo que granada es muy divertido. si es asi prometo ir un fin de semana y comprobar lo bueno de esos microbuses. para que veas que contesto a tus mensajes.besos desde vitoria.amparo
Pues sí, que sepas que el día menos pensado (es decir, cuando me vaya de viaje a ver a la güela a Sevilla) intentaré a ver si me puedo pasar a verte a tí y a tu frika. Que no veas como maneja al personal...
Hola, aqui la otra frika (q mal suena, llamadme lepera)
La experiencia de los microbuses es realmente tierna, pero como el perro este sa pillao el chabolo cerca, se pierde otra de las magnificas aventuras que nos ofrece la ciudad autobusera.
Estoy hablando de los ortobuses urbanos. Esas magnificas maquinas que cruzan la ciudad (7km) en media hora. Que lo mas bello es hacerlo en dia d, en hora h.
Traduccion, un dia de puente a la hora en que salen mas autobuses de la estación. Imaginaos: un autobus de esos grandes, con su acordeon en medio y to, lleno de peña hasta las barras, porque por encima de las barras van toas las maletas del personal. Claro, no te vas a llevar un cepillo de dientes si te vas cuatro dias por ahi, aunque hay quien lo hace (guarros).
Gracias a dios, el camino es recto, no hay peligro de curvas. Pero hay otra gracia: los semaforos. Pa que a toa la gente le de tiempo a comprar el billete, el conductor se mueve a toa leche, esquiva "segunda fila"s, adelanta motos y asusta abuelas. y todo ello sin saltarse ni un solo semaforo, que tiene merito.
Les aconsejo que despues de la experiencia visiten un quiropractico, o a un experto en puzles, por que con el remeneo de acelera-frena-avisa so cabron, les hara falta.
Un beso a todos.
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