ANECDOTAS TONTAS, (vol.4) :EL BURRO

Este viernes fue mas psicodelico que de costumbre en el campo…despues de haber sido secuestrado por los extraterrestres camperos, como cada semana, (mi familia…para los no iniciados), pasó algo que muchos no os vais a tomar en serio (sobre todo viniendo de mi, que nos conocemos…).
Bueno, como todos supondreis, la noche de los viernes es propicia para varias cosas…a saber:
-Uno, si se es joven y sin pareja, para irse de botellón o de marcha con la ilusión de “mojar”(que, no nos engañemos, rara vez deja de ser una ilusión…)
-Dos, si se tiene pareja y no se trabaja al dia siguiente, es el dia perfecto para echar un casquete, mojar el churro o lo que querais…
-Tres, si vuestro caso no es ninguno de los anteriores o estais cansados…a dormir (que era justamente lo que yo estaba haciendo)
A cosa de la una y pico de la mañana, me despierta un ruido en la terraza que da a mi ventana, pero como la luz estaba apagada y no había luna, no se veia un carajo.

Lo primero que pensé fué que alguien estaba robando, así que cogí un palo, encendí las luces de fuera y me encontre cara a cara con… el burro que nos han dejado para que se coma la hierba del terreno detrás de mi casa, que se había fugado.

Me mira.

Lo miro.

Nos miramos…y empieza a correr el muy cabrón…
Resultado, mi primo y yo en pijama y a oscuras corriendo detrás de un burro por mitad del campo.
Asi nació el nuevo deporte olímpico…los 1100 metros burro.
Vosotros tambien podeis amigos, solo necesitais tres cosas... un burro (de los de cuatro patas), nocturnidad (pa darle emocion a la cosa) y estar mal de la cabeza…que manda guevos lo de tirarse al campo a medianoche pa correr detrás de un burro.